La Institución Provincia canónica “Ibérica” del Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza manifiesta:
I. San Marcelino Champagnat, siendo consciente de la importancia social que tenía la educación de la infancia y la juventud, fundó en 1817 el Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza o Hermanitos de María, con el fin específico de evangelizar a través de la educación.
Nacida del Espíritu, la misión que Marcelino confió a sus hermanos fue “dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar”. Nos entregamos, junto con otros maristas, a la evangelización y educación de los niños y jóvenes, especialmente de los empobrecidos, los más necesitados y los que viven en las periferias geográficas y existenciales.
Hacemos nuestro su pensamiento de que “para educar bien a los niños hay que amarlos, y amarlos a todos por igual”. Según este principio, los rasgos particulares de nuestro estilo educativo son: presencia, sencillez, espíritu de familia, amor al trabajo y seguir el modelo de María, nuestra “Buena madre”. Adoptamos estas actitudes y valores como nuestra forma de inculturar el Evangelio.
Desde entonces, son muchas las obras educativas que ha iniciado la Institución dando respuesta a su finalidad fundacional, adaptando sus líneas pedagógicas a los nuevos avances y a las transformaciones sociales que se han producido.
II. Actualmente vivimos una época de cambios sociales, políticos y culturales, rápidos y continuos, que tienen una clara incidencia en el campo de la educación. Los nuevos retos del mundo piden respuestas audaces e innovadoras desde el ámbito educativo.
Los nuevos contextos sociopolíticos, eclesiales e institucionales, así como los cambios de legislación, reclaman una constante actualización de nuestras obras educativas, para adecuarse a las nuevas exigencias y a los desafíos cambiantes.
Responder a todos estos retos supone realizar acciones conjuntas y coordinadas e implica la reorganización de las estructuras, de las obras educativas y de las formas de gestión y animación.
III. La Provincia marista Ibérica cree en una educación que genera procesos que llevan a reconocer la dignidad de toda persona como ser amado por Dios, que despierta la conciencia crítica, la solidaridad, la ecología integral, el compromiso con la justicia social y el cuidado de la vida.
Desde ese convencimiento, anima y tiene la voluntad de constituir “Maristak Euskadi Fundazioa” con una finalidad educativa, tal como se expresa en sus Estatutos; finalidad que se desarrollará de acuerdo con el Evangelio, la Iglesia católica y el carisma de San Marcelino Champagnat.
Los órganos de gobierno, representación, administración, dirección y gestión de “Maristak Euskadi Fundazioa” velarán por el logro de los fines establecidos en sus Estatutos y concretarán las actuaciones necesarias para alcanzarlos.
IV. La educación integral de la persona está en el centro de la misión de la Provincia marista Ibérica. La educación marista pone el acento en el respeto a las personas, sea cual sea su condición y en el encuentro profundo en las relaciones interpersonales. Educamos desde la cercanía y la presencia, entendidas como ámbitos de crecimiento entre sujetos y sociedades, fundamento de una convivencia cordial y pacífica, apertura a Dios y a la humanidad.
Urteak joan eta urteak etorri, Irakaskuntzako Anaia Maristen Institutuak komunio Elizaren bidea egiten jarraitzen du. Anaiak eta laikoak, "Familia marista" sentitzen direlarik, zeregina partekatzetik misioa partekatzera igaro dira, karisma maristan parte hartzeko nahiarekin. Laikoek eta anaiek parte hartzen dute hezkuntza-obren zuzendaritza eta kudeaketan, hezkuntza-agenteen, administrazio eta zerbitzuetako langileen etengabeko prestakuntzan, pastoraltzan eta ikastetxeen berrantolaketan, egungo erronketara egokitzeko.
Es voluntad de la Provincia marista Ibérica crecer en corresponsabilidad y dar continuidad a la misión educativa de sus centros. La Fundación se constituye como el marco jurídico que cobija estos deseos y los potencia.
La mutua implicación de laicos, laicas y hermanos requiere, por parte de todos, el compromiso de garantizar la finalidad evangelizadora de la Fundación. Este compromiso es básico y necesario en el presente y en el futuro. En este sentido, los procesos de discernimiento y toma de decisiones han de ser siempre compromisos compartidos: “Hermanos y laicos, juntos en la misión, en la Iglesia y en el mundo”.
V. “Maristak Euskadi Fundazioa” se constituye con el objetivo de asumir la titularidad, dirección, animación y gestión de centros educativos pertenecientes a la Provincia marista Ibérica. La Fundación deja abierta la posibilidad de integrar a otros centros, así como la inclusión o colaboración con otras entidades maristas como pueden ser asociaciones y federaciones.
VI. “Maristak Euskadi Fundazioa”, que promueve y constituye la Provincia marista Ibérica, se proyecta hacia el futuro como cauce de vida y compromiso con la educación evangelizadora e integral. Hoy, en sintonía con el momento presente, la educación marista:
- Educa desde comunidades que aprenden, formando personas para convivir en sociedades plurales, interculturales, democráticas, inclusivas, ecológicas y solidarias.
- Aporta a la sociedad actual y a la futura una estructura educacional abierta y justa, no discriminatoria, que favorece el acceso a la educación, a la cultura y a la formación de todos los niños, niñas y jóvenes, en especial a los que socialmente son más vulnerables y necesitados, desde el respeto a la persona.
- Ofrece los recursos necesarios para la renovación pedagógica, adaptándose a las circunstancias actuales, lugares y tiempos de aquella visión educativa que en su momento comportó la fundación del Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza.
En Alcalá de Henares, a 18 de noviembre de 2022.